domingo, 19 de marzo de 2017

Bibliografías Recomendadas


G.E. Hernando. Repertorio de medicina y cirugía. Bases moleculares del cáncer. Revista. Vol, 20. No. 4-2011. Pag. 210-224  Versión Digital
http://repertorio.fucsalud.edu.co/fbp/volumen20-42011/files/assets/downloads/publication.pdf#page=5

Kumar, V. Abbas, A Y N Fausto, Patología Estructural Y Funcional (Robbins Y Cotran) 9va Edición España. Editorial Elsevier  



Instituto nacional del cáncer. cancer.gov.  Factores de Riesgo del cancer. Disponible en: http://www.cancer.gov/espanol/cancer/causas-prevencion/riesgo/

https://www.youtube.com/watch?v=mL6ZBSxdJOA

https://www.youtube.com/watch?v=onIUlV2Ra54

Instituto nacional del cancer. .cancer.gov. Causas y Prevencion. Disponible en: http://www.cancer.gov/espanol/cancer/causas-prevencion/riesgo

Robbins y Cotran. Atlas de Anatomia Patologica. 1a Edición. 2007. Pagina 164 y 165.
Brandan, Nora y Juaristi, Julián,  Profesores Titulares. Cátedra de Bioquímica. Facultad de Medicina. UNNE.  Consultado el: Disponible en ht Judith Meza Junco, Aldo Montaño Loza; Álvaro Aguayo González. Revista de Investigación clínica. Rev. Invest. Clin. 2014(25 de marzo de 2014);v.58 n.1. Disponible en: 
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S0034-83762006000100008&script=sci_arttext

Mural.uv.es. valencia; Ana Núñez Villén; mayo 2008. Disponible en:
http://www.slideshare.net/saShaLameDiXica/factores-crecimiento-y-receptores-2008

Tania Lahera Sánchez, Obdulio Juan González Hernández. Revista Habanera de Ciencias Médicas. Rev haban cienc méd v.9 n.2 Ciudad de La Habana abr.-jun. 2010. Disponible en: 
http://scielo.sld.cu/scielo.php?pid=S1729-519X2010000200006&script=sci_arttext

med.unne.edu.ar/catedras/bioquimica/pdf/oncogenes.pdf

Regulación del ciclo celular y desarrollo de cancer: perspectivas terapéuticas. Salud Pública Méx 1997; Vol. 39(5):451-462         
http://bvs.insp.mx/rsp/articulos/articulo.php?id=000756

INSTITUTO NACIONAL DE OFTALMOLOGIA MINISTERIO DE SALUD SERVICIO DE ONCOLOGiA OCULAR Y ORBITA. Patogenia del Retinoblastoma

Retinoblastoma

Patogenia del Retinoblastoma
El gen retinoblastoma (Rb) codifica una proteína que actúa con la alteración de la actividad de los factores de transcripción. A través de la interacción con los factores de transcripción, Rb es capaz de controlar indirectamente la expresión de gen.

      Primer Gen supresor tumoral descubierto
      60% esporádico
      40% familiares
      Rasgo autosómico dominante
      Desarrollo de osteosarcoma

Para explicar la aparición hereditaria y esporádica de un tumor aparentemente idéntico, Knudson propuso su ahora canónica hipótesis de la oncogenia en dos golpes.

Se requieren dos mutaciones (golpes) que afectan ambos alelos de RB en el locus cromosómico 13ql4 para producir un retinoblastoma. En algunos casos, el daño genético es lo suficientemente grande para ser visible en forma de una deleción de 13ql4.

En los casos familiares, los niños heredan una copia defectiva del gen RB en la línea germinal (un golpe); la otra copia es normal. El retinoblastoma se desarrolla cuando el alelo RB normal esta mutado en los retinoblastos como consecuencia de una mutación somática espontanea (segundo golpe). Puesto que solo se requiere una única mutación somática para la perdida de función de RB en las familias con retinoblastoma, el retinoblastoma familiar se hereda como rasgo autosómico dominante.



En los casos esporádicos, ambos alelos RB normales deben sufrir mutación somática en el mismo retinoblasto (dos golpes). El resultado final es el mismo: una célula retiniana que ha perdido completamente la función RB se vuelve cancerosa.

Imagen que ilustra un resumen de la hipótesis de la oncogenia en 2 golpes:


La hipótesis de Knudson puede plantearse y explicarse en la siguiente imagen:


Modos de Acción de los Oncogenes


Los oncogenes se crean mediante mutaciones en los protooncogenes y se caracterizan por la capacidad para promover el crecimiento celular en ausencia de señales promotoras del crecimiento normales. Sus productos, llamados oncoproteinas, se asemejan a los productos normales de los protooncogenes, excepto porque las oncoproteinas a menudo están desprovistas de elementos reguladores internos importantes y su producción en las células transformadas no depende de factores de crecimiento ni de otras señales externas. Los oncogenes sólo precisan estar mutados en un alelo, para que se produzca la sobreexpresión de una proteína dada y esta ejerza su acción promotora. 

El paso/activación de protooncogén a oncogén se puede producir por diferentes mecanismos:

Translocación: cuando una parte de un cromosoma se liga a otro. El resultado es un híbrido de cromosoma, detectable en el cariotipo. Esto da lugar a una alteración en la transcripción del DNA.


Mutaciones puntuales: sustitución de un par de bases por otro par en una secuencia de DNA, por ejemplo G:C por A:T.


Amplificación: las células eucariotas están formadas por un genoma diploide, es decir, tienen dos copias de cada gen. En este proceso, el proceso normal de la replicación del ADN tiene errores muy serios. El resultado es que, en vez de hacer una sola copia de una región en el cromosoma, varias copias son producidas. Esto lleva a la producción de varias copias de los genes que se encuentran en esa región del cromosoma.




Mutagénesis por inversión, duplicación, supresión: En estas alteraciones, segmentos de ADN son liberados de un cromosoma y reinsertados en posición contraria. Como en ejemplos previos, este reacomodo puede llevar a la expresión genética anormal, ya sea por la activación de un oncogén o desactivación de un gen supresor de tumores.

Por consiguiente, las oncoproteinas estimulan una mayor proliferación celular atravesó de uno de los siguientes mecanismos.

Factores de crecimiento
Existe expresión constitucional de los factores de crecimiento y los receptores relacionados, generando un circuito autocrino de señalización celular.

Las células normales requieren la estimulación por factores de crecimiento para sufrir proliferación. La mayor parte de los factores de crecimiento solubles formados por un tipo celular actúan sobre una célula vecina para estimular la proliferación (acción para crina). Muchas células cancerosas, sin embargo, adquieren la capacidad para sintetizar los mismos factores de crecimiento a los que responden, generando un ciclo autocrino.

Por ejemplo, muchos glioblastomas secretan factor de crecimiento derivado de las plaquetas (PDGF) y expresan el receptor PDGF y muchos sarcomas forman tanto el factor de crecimiento transformante a (TGF-a) como su receptor.

En la siguiente animación, estas señales serán representadas por el factor de crecimiento en forma de "X" y el pie en la porción del video:


Receptores de factor de crecimiento
Por mutaciones en los receptores de los factores de crecimiento, tirosinasas no asociadas a receptores o moléculas señalizadores posteriores que determinan una señalización constitucional.

Para entender cómo afectan las mutaciones la función de estos receptores, debe recordarse que una clase importante de receptores de factor de crecimiento son las proteínas transmembrana con un dominio externo de unión de ligando y un dominio citoplasmático para la tirosina cinasa. En las formas normales de estos receptores, la cinasa se activa transitoriamente por la unión de los factores de crecimiento específicos, seguido rápidamente por la dimerización del receptor y la fosforilación con tirosina de varios sustratos que forman parte de la cascada de señales. Las versiones oncogenes de estos receptores se asocian con la dimerización y la activación constitutivas sin unión al factor de crecimiento. Por tanto, los receptores mutantes liberan señales mitogenas continuas a la célula, incluso en ausencia de factor de crecimiento en el entorno.

Imagen que ilustra un esquema de interacción de los receptores de factor de crecimiento en una célula: 


Proteínas transductores de la señal
Estas proteínas se localizan estratégicamente en la capa interna de la membrana plasmática, donde reciben señales del exterior de la célula (p. ej., mediante activación de los receptores de factor de crecimiento) y las transmiten al núcleo de la célula. Bioquímicamente, las proteínas transductores de la señal son heterogéneas.

El ejemplo mejor estudiado de una oncoproteina transductor de señal es la familia RAS de proteínas que se unen a la guanosina trifosfato (GTP) (proteínas G)

Los productos del gen Ras están involucrados en los caminos de señalamiento de quinasa que controlan la transcripción de genes, los cuales entonces regulan el crecimiento y la diferenciación celular. Para "encender" el camino, la proteína ras debe ligarse a una molécula particular (GTP) en la célula. Para "apagar" el camino, la proteína ras debe de romper la molécula GTP. Alteraciones en el gen ras pueden cambiar la proteína ras para que ya no sea capaz de romper y liberar el GTP. Estos cambios pueden causar que el camino se atore en la posición de "encendido".  La señal de "encendido" lleva al crecimiento y a la proliferación celular. Por lo tanto, la sobreexpresión de ras y su amplificación puede llevar a una proliferación celular continua, la cual es un gran paso en el desarrollo del cáncer. 
.
Proteínas reguladoras nucleares
Las mutaciones que desencadenan la actividad oncogén latente se producen en varias tirosinas cinasa no asociadas a receptor, que se ubican normalmente en el citoplasma o en el núcleo. Estas normalmente intervienen en las vías de transducción de la señal que regulan el crecimiento celular Igual que sucede con las tirosinas cinasas ligadas a receptor, en algunos casos las mutaciones se deben a translocaciones o reordenamientos cromosómicos que dan lugar a genes de fusión que codifican tirosina cinasas activas de forma constitutiva.

El gen c-myc es uno de los más importantes proto-oncogenes que codifican proteínas nucleares. Los productos proteicos del c-myc y otros genes myc, así como de muchos otros protooncogenes, regulan la transcripción de una cohorte de genes diana en el núcleo uniéndose a la secuencia de ADN de estos últimos, permitiendo o impidiendo su transcripción.La proteína myc actúa como un factor de transcripción y controla la expresión de varios genes. Se han encontrado mutaciones en el gen myc en distintos tipos de cáncer, incluyendo linfoma de Burkitt, leucemia de células B y cáncer pulmonar. La familia myc de oncogenes se puede activar con una reorganización de genes o amplificación. Las reorganizaciones de genes involucran la ruptura y la reunión de cromosomas. Este proceso puede involucrar grandes cantidades de ADN y puede afectar a muchos genes. El movimiento de un gen o grupo de genes hacia una ubicación diferente dentro del mismo cromosoma o hacia otro cromosoma a veces lleva a una expresión de gen y función celular alterada.

La translocación cromosómica es un tipo de reorganización de genes, y una translocación entre los cromosomas 8 y 14 ha demostrado resultar en una sobreexpresión de myc y a última instancia linfoma de células B.


Reguladores del ciclo celular
Existen 2 puntos principales de regulación del ciclo celular, uno en la transición G1/S y otro en la transición G1/M; cada uno de ellos esta rigorosamente regulado por el equilibrio entre los factores que fomentan el crecimiento y los que lo suprimen.

Las principales mutaciones asociadas al cáncer afectan el punto de regulación G1/S, y estos se agrupan en 2 categorías:

  1. Mutaciones con ganancia de la función de los genes de ciclina D y CDK4, oncogenes que fomentan la progresión G1/S.
  2. Mutaciones con perdida de la funcion de los genes supresores de tumores que inhiben la progresion G1/S.
Cdc2 que regula a la fase S y M, codifica una proteincinasa serina/treonina que se encuentra en niveles constantes y regulada por factores exógenos. Las ciclinas son creadas en la interfase y destruidas al final de la mitosis.

Las que actúan en G1/s (C, D, E) las E son asociadas con cdk2, que se puede combinar con Rb y E2F. las ciclinas D se asocian con cdks 2, 4 y 5. La ciclina D-cdk4 fosforila el producto del gen Rb; los ciclina DI y D3-cdk2 se asocian al antígeno nuclear de proliferación celular.

La familia de genes supresores son p21, p27 y p16, que regulan el ciclo celular aberrante al interferir con las cinasa de cdk. Como también inducen la expresión del gen p53

La imagen siguiente muestra el ciclo del defecto canceroso.




Genes Supresores en Tumores Humanos

De la misma manera que los oncogenes dirigen la proliferación de las celulas, los productos de los genes supresores tumorales aplican frenos a la proliferación celular.

Continuando con la analogía de la sección de Oncogenes, los supresores de tumor pueden ser comparados con el sistema de frenos de un coche. Si piensa en cada copia de cualquier gen supresor de tumor como un contribuyente de "poder de frenado" para la célula, entonces la analogía es bastante buena. Cuando las dos copias de un gen supresor de tumor están funcionando (representado en la animación por los genes más claros y las señales de alto) la célula puede dejar de dividirse (el coche puede dejar de moverse).


Los genes que normalmente bloquean la progresión del ciclo celular son conocidos como supresores tumorales. Los supresores tumorales evitan la formación de tumores cancerosos cuando trabajan correctamente, y cuando estos mutan y por lo tanto no funcionan, se pueden formar tumores.

La siguiente ilustración muestra el proceso del daño de los genes en la progresión de un tumoral.



Los productos proteicos de los genes supresores tumorales pueden funcionar  como:
  • Factores de transcripció
  • Inhibidores del ciclo celular
  • Moléculas de transducción de la señal
  • Receptores de superficie celular
  • Reguladores de las respuestas celulares al dano del ADN.

Imagen que ilustra los efectos de los productos proteicos de los genes supresores a nivel celular:


Mecanismos



PROTOONCOGENES, ONCOGENES Y ONCOPROTEÍNAS

Cumplen varias funciones, pero en su conjunto participan en las vías de señalización que impulsa la proliferación. Ahora bien, los protooncogenes favorecedores del crecimiento codifican en un estado de normalidad los factores de crecimiento, los receptores de los factores de crecimiento, transductores de señal, factores de transcripción o componentes del ciclo celular.

Los oncogenes correspondientes codifican en general secuencias genómicas que dan como resultado oncoproteínas que cumplen funciones similares a las de los protooncogenes en condiciones normales, con la diferencia de que les confieren a dichas proteínas una autosuficiencia para crecer.

La mayoría de las neoplasias muestran defectos moleculares de uno o más componentes de estas vías, a continuación una breve descripción de estos defectos:

Factores de crecimiento:
Los factores de crecimiento son sintetizados por un único tipo celular que lo secreta en un mecanismo paracrino, pero en las células cancerosas adquieren una capacidad para sintetizar estos factores de crecimiento y mediante una acción autocrina. Muchos de estos tumores expresan el factor de crecimiento derivado de plaquetas (PDGF) y la tirosina cinasa de los receptores de PDGF, en otras ocasiones y dependiendo de la localización del tumor puede que sea el factor de crecimiento transformante alfa (TGF-alfa) y su receptor asociado, el factor de crecimiento epidérmico, entre otros. Debemos de tomar en cuenta que el gen propio que sintetiza el factor de crecimiento no está alterado o mutado, lo que puede que suceda es que ciertas oncoproteínas determinen la sobreexpresión o la hipersecreción de estos factores de crecimiento.

Receptores de los factores de crecimiento:
Varios oncogenos codifican receptores de factores de crecimiento, en los que destacan los receptores de la tirosina cinasa. En las células tumorales, los receptores de la tirosina cinasa se pueden activar de forma constitucional por diversos mecanismos como mutaciones puntuales, reordenamientos génicos y amplificaciones génicas.


Algunas mutaciones de oncogenas de los receptores de factores de crecimiento de importancia clínica son las siguientes:

ERBB1
Codifica el receptor del factor de crecimiento epidérmico (EGFR), puntualmente sufre de mutaciones en algunos adenocarcinomas de pulmón, lo que activa de manera constitucional la tirosina cinasa EGFR.

ERBB2
Codifica a otro miembro de la familia de receptores de tirosina cinasa, HER2. Este gen en determinados tipos de carcinomas, como el de mama, en lugar de tener mutaciones puntuales sufre de amplificaciones con la consiguiente sobreexposición del receptor de HER2 y actividad constitucional de la tirosina cinasa.

Reordenamientos génicos 
Estos activan otros receptores de la tirosina cinasa, como la tirosina cinasa ALK. En este tipo vemos claramente la deleción del cromosoma 5 que fusiona parte del gen ALK con parte de otro gen llamado EML4, este es el ejemplo por excelencia en ciertos adenocarcinomas pulmonares. Este proceso conlleva a la reorganización de una proteína quimérica EML4-ALK, que posee actividad constitucional de tirosina cinasa.

Componentes distales en la vía señalizadora de los receptores de tirosina cinasa: en condiciones normales el receptor de tirosina cinasa en su porción citoplasmática estimula la RAS y dos ramas señalizadoras posteriores, la cascada MAPK y la vía PI3K/AK. Estos componentes sufren de una mutación en algunos tipos de cáncer, por ejemplo, las mutaciones de RAS, hacen que este se active y reemplace por completo la función de la actividad de la tirosina cinasa.

Mutaciones de RAS 
En los humanos hay tres tipos conocidos HRAS, KRAS, y NRAS; en condiciones normales son miembros de la familia de pequeñas proteínas G asociadas a la membrana que se unen a nucleótidos de guanosina (GTP y GDP). Asimismo, se ha demostrado que la RAS tras una activación transitoria activa una señal de intercambio de GDP por GTP, lo que estimula las ramas MAPK y PI3K/AKT de la via de señalización de la tirosina cinasa. En las células cancerosas cuya mutacion es puntual sobre RAS, reducen notablemente la actividad GTPasa, con esta forma envían señales de crecimiento constante a las células.

Mutaciones de oncogenas de BRAF y PI3K 
BRAF es una proteína cinasa de serina7treonina situada en el vértice de una cascada de otras cinasas serina/treonina de la familia MAPK. Las mutaciones en este activan cada una de estas cinasas y activan los factores de transcripción. PI3K es un heterodimero compuesto por una subunidad reguladora y una subunidad catalítica con varias isoformas tisulares específicas. Las mutaciones de este atacan su subunidad catalítica y suelen elevar su actividad catalítica.

Alteraciones de la tirosina cinasa no asociada a receptores
Por lo general estas se encuentran en el citoplasma o en el nucleo. Estas generan traslocaciones o reordenamientos cromosómicos que generan genes de difusión que codifican tirocina cinasa de actividad constitucional.

GENES SUPRESORES DE TUMORES

Un gen supresor tumoral es un gen que reduce la probabilidad de que una célula en un organismo multicelular se transforme en una célula cancerígena. Los genes supresores de tumores se encuentran en las células normales y generalmente inhiben la proliferación celular excesiva. Una mutación o una deleción de un gen supresor tumoral, aumentará la probabilidad de que se produzca un tumor, al perder su función. De esa manera, un gen supresor tumoral alterado es similar a un oncogén.

En las células normales, las proteínas codificadas por los genes supresores de tumores detienen la progresión del ciclo celular en respuesta a un daño en el ADN o a señales de supresión del crecimiento provenientes del medio extracelular. Cuando los genes supresores de tumores están mutados o son inactivos, las células no pueden responder normalmente a los puntos de control del ciclo celular, o son incapaces de realizar muerte celular programada si el daño del ADN es demasiado importante.

Funciones de los productos de los genes supresores de tumores:

Las proteínas codificadas por la mayoría de los genes supresores de tumores inhiben la proliferación o la supervivencia de la célula. Por lo tanto, la inactivación de los genes supresores de tumores conduce al desarrollo del tumor eliminando proteínas de regulación. Varios genes supresores de tumores codifican proteínas reguladoras de transcripción. Otros de los productos de estos genes regulan la progresión del ciclo celular siendo capaces de actuar como oncogenes. Los productos de estos genes actúan a través de mecanismos muy diversos:

Inhibiendo la progresión de las células a través del ciclo celular.
Haciendo que las células entren en apoptosis.
Manteniendo la estabilidad del genoma (replicación, reparación y segregación).

Los genes supresores de tumores pertenecen a distintos tipos de proteínas, como factores de crecimiento, de adhesión celular, control del ciclo celular, factores de transcripción, reparación del ADN

Actualmente se conocen tres formas de inactivación de estos genes:

Por mutaciones puntuales

Las más frecuentes son las que conducen a cambios en el marco de lectura del gen, mutaciones que conducen a codones de parada (codones STOP) y mutaciones de cambio de aminoácido.

Por deleción
Con frecuencia, la deleción incluye además a genes vecinos del gen supresor de tumor.

Por metilación. 

Tipos de genes supresores:

Genes supresores de tumores “guardianes o gatekeepers”
Se encuentran en los síndromes de cáncer hereditario autosómico dominantes. Su función es regular directamente el crecimiento celular. Bloquean el desarrollo de tumores al regular la transición de las células a través de los puntos de control existentes en el ciclo celular o mediante la estimulación de la muerte celular programada, con control de la división y la supervivencia celulares. Las mutaciones con pérdida de función en los genes guardianes dan lugar a una mutación celular incontrolada.

Los genes supresores de tumores guardianes codifican:
  • Los reguladores de diversos puntos de control del ciclo celular.
  • Los mediadores de la muerte celular programada.
Genes “cuidadores” o “de mantenimiento” (caretakers)
Se encuentran en los síndromes de cáncer autosómico dominante. Están implicados en la reparación de las alteraciones del ADN y en el mantenimiento de la integridad del genoma. La pérdida de función de los genes cuidadores permite la acumulación de mutaciones en los oncogenes y en los genes guardianes, lo que da lugar, en conjunto, a la iniciación y la promoción del cáncer.

Los genes supresores de tumores cuidadores codifican:

  • Las proteínas responsables de la detección y la reparación de las mutaciones.
  • Las proteínas implicadas en las disyunciones cromosómicas normales durante la mitosis.
  • Los componentes del dispositivo de muerte celular programada. 


Biología Celular del Cáncer

Alteraciones esenciales para la transformación maligna:

Autosuficiencia en las señales de crecimiento: Tumores pueden proliferar sin estímulo externo, por activación de los oncogenes.

Falta de sensibilidad a señales inhibidoras de crecimiento: TGF-b, inhibidores de cinasas dependientes de ciclina.

Evasión de la apoptosis: Puede ser consecuencia de inactivación de p53.

Defectos en la reparación del ADN: No consiguen reparar daños en el ADN conduciendo a una inestabilidad genómica y mutaciones en los protooncogenes y genes supresores tumorales.

Potencial replicativo ilimitado: Se asocia con el mantenimiento de longitud y función del telómero.

Angiogénesis mantenida: Los tumores deben tener un aporte vascular inducido principalmente por VEGF.


Capacidad de invadir y metastatizar: Procesos intrínsecos a la célula o iniciados por señales del entorno tisular.

Causas




Edad
La mayoría de los carcinomas aparecen en los últimos años de vida. Es la principal causa de muerte en mujeres de 40- 79 años de edad y en los hombres de 60 - 79 años de edad.  El 60% del cáncer en niños de debe a leucemia aguda y las neoplasias primitivas del sistema nervioso central.

Herencia
Se calcula que menos del 20% de los cánceres son de causa hereditaria. En algunos trastornos hereditarios, los cromosomas tienen una fragilidad intrínseca; estos procesos conllevan un riesgo elevado de cáncer.

Dieta
Los científicos han estudiado muchos aditivos, nutrientes y otros componentes de la dieta para buscar posibles asociaciones con el riesgo de cáncer. Estos son: Alcohol, Antioxidantes, Edulcorantes artificiales, Carne azada,verduras crucíferas

Factores Virales
El virus de Epstein-Barr se asocia con el linfoma de Burkitt y los linfoepiteliomas, el virus de la hepatitis con el hepatocarcinoma, y el virus herpes tipo II o virus del herpes genital con el carcinoma de cérvix. Todos estos virus asociados a tumores humanos son del tipo ADN. El virus HTLV, sin embargo, es del tipo ARN, o retrovirus, como la mayor parte de los virus asociados a tumores en animales. Produce una leucemia humana. Estos virus del tipo ARN contienen un gen denominado oncogen viral capaz de transformar las células normales en células malignas.

Factores Inmunes
Se cree que el sistema inmunológico es capaz de reconocer algunas formas de células malignas y producir células capaces de destruirlas. Algunas enfermedades o procesos que conducen a una situación de déficit del sistema inmunológico son la causa del desarrollo de algunos cánceres. Esto sucede en el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), enfermedades deficitarias del sistema inmunológico congénitas, o la administración de fármacos inmunodepresores.

Factores Ambientales
Se calcula que éstos son la causa del 80% de los cánceres. La relación causa efecto más demostrada es el humo de tabaco, inhalado de forma activa o pasiva; es responsable de cerca del 30% de las muertes por cáncer. Los factores alimentarios pueden ser responsables de un 40%, pero la relación causal no está tan establecida, y no se conocen con exactitud los constituyentes de la dieta que son responsables. La obesidad es un factor de riesgo para algunos cánceres como el cáncer de mama, colon, útero y próstata. El alto contenido en grasas y el pobre contenido en fibra de la dieta se asocian con una alta incidencia de cáncer de colon. Al igual que ocurre con el alcohol, las grasas y la obesidad parecen actuar como promotores.

Sustancias químicas y de otro tipo
Exposición a sustancias químicas, metales o pesticidas provocan un aumento en la posibilidad de desarrollar cáncer. Las sustancias que pueden producir cáncer se conocen como cancerígenos como asbesto, níquel, cadmio, uranio, radón, cloruro de vinilo, bencidino y benceno. Pueden actuar en conjunto con otros carcinógenos como el humo del cigarrillo, para incrementar el riesgo de cáncer. La inhalación de fibras de asbesto aumenta el riesgo de enfermedades pulmonares.

Radiación ionizante
Ciertos tipos de radiación como radiografías, rayos ultravioletas y rayos de sustancias radioactivas pueden producir daño al ADN de las células.